Cuando es necesario demoler un edificio, una pared, un muro, las masas son necesarias. Una persona, alguien si el muro es de escala posible o máquinas, si la escala supera al hombre.
Todos entendemos que demoler es necesario para construir otra cosa. Diferentes edificios, paredes, muros. Todos entendemos que para construir no hacen falta masas sino herramientas mas precisas y algo que es el certificado de honestidad: la voluntad de construir. Si quien construye manifiesta ése deseo y, finalmente construye, todos entendemos el bien común; si quien lo anuncia viene, en este caso, a trabajar sobre lo que resta del edificio con una masa no está construyendo. Para beneficiar a Charlie con derechos de autor. No se puede construir demoliendo hoteles. Digámoslo ya. La Carrió vino a demoler el Modelo Santa Fe de gestión.
El colega Sansó de la Madrid describe al ex gobernador, sobre el que la Carrió usó la masa de ida y vuelta, para que tenga, guarde y preste. …“Bonfatti podrá gustar más o menos a los amigos socialistas que comulgan con él o a quienes no, pero le reconocen méritos. Su buena presencia compensa su poca habilidad oratoria de prácticamente nula capacidad de convicción y dudosa habilidad para generar empatía y confianza en el interlocutor. Pero tuvo el tino de rodearse de un gabinete (heredado de Binner, en buena medida) de funcionarios aceptablemente bien plantados…”. Eso dice el colega. Es un eje del FPCyS, el verdadero eje del ataque de la Carrió. Ese hotel demuele.
Cuando la Carrió lo asimila a la efedrina (rarísima cuestión, mas cercana a Alberto y/o Aníbal Fernández, ciudad de San Lorenzo, UCR y el libro de entradas de Casa Rosada) y al delito de la complicidad con mafias narcotraficantes debemos preguntarnos si solamente demuele a Bonfatti que, por otra parte, debería defenderse judicialmente con mas vehemencia.
Bonfatti es el titular nacional del PSP, es presidente de la Cámara de Diputados, fue gobernador, fue ministro de gobierno de Binner, antes fue secretario de gobierno en la municipalidad de Rosario. El ex liceísta tiene una vida en cargos de gobierno. Debería defenderse mas enfáticamente, judicialmente hablando. En honor a su pasado y su futuro.
La Carrió destruye una relación societaria, ese es su objeto. Habla en nombre de Mauricio Macri (un presidente de la centro derecha democrática) y sostiene que los integrantes del gobierno del FPCyS están viciados de nulidad por connivencia con el delito. No dice que los gobernantes son ladrones, sería una mentira demasiado evidente (en Santa Fe, se insiste, ni el peronismo ni el socialismo, una vez castigados con la cárcel Aurelio Martínez y Antonio Vanrell y enjuiciados los policías corruptos, con “pejotas” y “pesepos” no se puede hablar de corrupción estructural) pero sostiene, la Carrió, que un exgobernador fue/es parte de un delito federal, punible en el mundo. No es poco. Es dar con la masa en la base de la credibilidad de Bonfatti, tras él debemos entender que su tarea es apuntar al jefe histórico: Hermes Binner. Es una cadena, por la acusación a Bonfatti quiere / necesita llegar hasta el actual gobernador: Miguel Lifschitz. La masa no es delicada o fina.
La Carrió es tan ególatra que es básica. No se detiene en metáforas. Trabaja poniendo tan claro su tarea que hasta quien esto escribe pueda entenderlo: Carrió vino a derrumbar el FPCyS como antes derrumbó el FAP (un armado nacional de centro izquierda crecido contra CFK, donde ella era una mas, ni siquiera la mas importante) Mas claro todavía: Carrió, herramienta de la centro derecha, vino a demoler el Modelo Santa Fe.
El Modelo Santa Fe en salud, en economías regionales y, básicamente, en entramado político, inquieta a Buenos Aires y la política central. Un manejo diferente de recursos y prioridades, una transparencia que no deja dudas (todas las estadísticas, todos los ministerios, todas las gestiones están en red y sus programas anunciados) y la mesa central dentro de territorio santafesino. Eso es peligroso. Muy peligroso.
No es Antonio Bonfatti el objeto del ataque, acaso sea el eslabón mas débil y la caracterización que hace Jorge Sansó de la Madrid explica (en parte) el asunto.
A la Carrió le preocupa que Santa Fe decida sus cuestiones en su territorio. Lo mismo le preocupaba a NK y por eso obligó al pusilánime Obeid a destripar un peronismo santafesino que no le era fiel ni adicto. Necesitaban que no volviese el reutemismo. Obeid cumplió. Lástima.
No hay diferencias entre la monarquía atenuada que tanto atrasó al país y esta gerencia de los CEOS gestionando Argentina como una casa central y sucursales que no pueden, no deben, no conviene que sean autónomas. Habrase visto semejante atrevimiento. Caramba.
Las campanas están sonando tras la primera demolición de la Carrió. Habrá mas. Los 50 mil millones que el grupo K le robó a la provincia de Santa Fe, a todos nosotros, sus habitantes, el gobierno de MM debe devolverlos porque así lo dice la justicia en su mas alta y última instancia. Eso no lo quiere la Carrió, para el caso ejecutora fiscal trucha, con una chuequera evidente a favor del gobierno central. Obras en el Obelisco si, dineros robados a Santa Fe ni pensar en que aparezcan.
También está claro que en las elecciones de octubre muchos juegan demasiadas cosas. Esto, que la Carrió entiende tan claramente, debe aplicarse a otra definición del colega Sansó, cuando describe a los dos candidatos a diputados nacionales, uno por Macri y la Carrió y el otro por Bonfatti, aunque lo asuma Lifschitz como propio.
“…un candidato como Luis Contigiani, quien con sus muchos méritos humanos mide tanto como Cantard, y encima arenga desde las tribunas como si estuviera hablando a los seguidores de Rosa Luxemburgo. Los militantes socialistas —devenido desde hace mucho en un partido tan burgués como la UCR, que nunca tuvo a su lado a los trabajadores argentinos y se desahució de tenerlos en 1946— lo miran entre fascinados y perplejos. Los he visto en los actos, parecen preguntarse de qué habla…”
Pregunta sin respuesta ¿ a quien definen estos candidatos a diputados, qué proyectos, con qué capacidad de eso, de defensa? Otra ¿ qué jefaturas aparecen tras sus nombres, que evidentemente no son de alta jerarquía mediática? Una mas ¿al Modelo Santa Fe de gestión lo destruye una masa … tan débil su construcción… hay gente ayudando desde dentro…? Contra la masa una sola herramienta popular. El voto.
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