Bárbaro dice cosas serias

-Estoy con sensaciones encontradas. Esta señora –estoy hablando de la señora presidente- ¿no necesitará alguien que converse con ella y le cuente alguna otra cosa distinta al relato que le hablan? Esa es una moción de anhelo de una parte. Y la otra: ¿cómo hacer para que se calme? Para que tenga un respiro, y con el respiro de ella un respiro para nosotros.

Si, y lo peor es esta confusión que tiene entre estas dos palabras que son diálogo y monólogo. Porque la diferencia es importante, el monólogo es de uno y el diálogo es de varios. Y ella dice ‘vamos a hablar’ y habla. Y me parece que si el lugar de los demás es el aplauso el discurso es inalterable. Y eso es lo que nos parece negativo.


-Sobre esto hay otra cuestión, que es la siguiente: la representación popular, el valor del voto, el juego que hace este modo extremo del voto popular que tiene la señora Cristina y los suyos, y el desprecio que ahora ha plantado para con el mismo voto, esto es, “voten, vayan a que los voten y si no, no me jodan, y aún cuando a ustedes los votó el 70% y a mí no, igual no me jodan”. Ese uso de la potestad popular que da el voto no me gusta.

No le gusta a nadie.

-No, creo que hay un 28% de núcleo duro a los cuáles les gusta esto que está haciendo Cristina.

Está bien. A Dios gracias voy y yo, junto con los demás del 70%, estamos contentos porque el riesgo era que el autoritarismo fuera el 50. Al ser el 26 es cambiarle por la democracia. Eso es lo que nos tranquiliza. Ahora, en la medida en que hay un mundo oficial, con radio, televisión, hay un mundo de obsecuentes, en el relato de la secta la realidad molesta, y como ellos son los dueños de la verdad, y la verdad es inalterable, todos los demás somos parte del neoliberalismo, las corporaciones. Cuando uno los escucha no sabe si te da lástima, bronca, asco. Pero los que pesamos distintos somos un estamento inferior. Y esto es maravilloso ¿no?

-Que alguien entienda que le ‘maravilloso’ que estás diciendo es con una fina ironía.

Claro.

-Hay otro hecho. Yo lo llamo a esto monarquía de baja intensidad, lo que nos está sucediendo. Pero en esta sociedad, la injusticia social –ponele mayúscula- es una voz que nos está reclamando a los peronistas desde la historia ‘muchacho, resolvamos este tema’.

Lo importante es que ella decidió hace rato separarse del peronismo y tomó otra concepción, que es la que vemos en Diana Conti, Sabatella. Estos muchachos, mucho que ver con nosotros no tienen. Pero, por otro lado, el tema no es el peronismo o no el peronismo, es la democracia contra el autoritarismo. Y el autoritarismo es un discurso único, impuesto como tal. Y lo de ayer era una convocatoria al diálogo sin escuchar al otro. Es una cosa que, a todos los que tenemos una mirada democrática, nos llama la atención y nos cuestiona, no pone el gobierno en un lugar complicado.

-La historia menuda de Argentina, en el siglo XXI, pone a Néstor Kirchner como el que bordaba, zurcía y acomodaba los trapos, y a la señora como la que llegaba al banquete. Muerto el que zurcía, bordaba y acomodaba los trapos, la señora sigue llegando al banquete. Vos estuviste en ese gobierno y conversaste con el muerto, ¿no hubo suplencia?, ¿no hay suplencia para eso?

No, creo que el gran constructor fue Néstor. Cuidado, con Néstor también hoy tendríamos grandes diferencias, las tuvimos en vida. No lo voy a ensalzar porque no esté, pero creo que ella nunca construyó, ella actúa como la heredera. Y en alguna medida lo que él pudo armar, armonizar, convocar, ella lo hace desde la obediencia. Obedecen o se van, no va a ceder un ápice. Y esto es lo que estamos viviendo. Es raro, porque después de la derrota de las PASO uno imaginaba que iban a ponerse más tranquilos; no, están más duros y yo pienso que van a perder más votos. Así no van a ganar más, van a espantar más votos.

-Podríamos como resumen plantear lo siguiente: Argentina necesita diálogos y esta señora nos da monólogos.

Eso. Y además otra cosa, la pregunta ¿cuántos votos espantan los leales? El costo es enorme, de dinero del Estado que podría ir a los necesitados. Y el resultado: todo medio leal, todo periodista leal es pianta votos. Cuando el kirchnerismo funcionó bien lo hizo con los medios libres. Cuando armó su estructura de medios definió su propia decadencia.

Julio Bárbaro: entrevista con Bigote Acosta para La Vereda de Enfrente 22/08/2013